domingo, 31 de diciembre de 2006

Mover

Un libro, una manta, una pollera, una sandalia, un libro, un zapato, una maceta, una camisa, un libro, una hamaca paraguaya, un sombrero, una percha, un libro, compacts miles, carpetas, papeles, un libro, un armario, una heladera, un perfume, un libro, un remedio, un televisor, una caja, un libro, un velador, un diario, un reloj, un libro, un libro, un libro, un libro...

lunes, 25 de diciembre de 2006

Fiestas

Encuentros y desencuentros.
Querer estar aquí y allí y allá.
Difícil.
También, mucho cansancio.
Hoy hay olor a mudanza. Cajas en el living y un barullo en el estómago.
Cajitas de chocolates. Papel de regalo. Esparcido.
El mate que nos regaló Miguel está curándose en la mesa de la cocina.
Fotos recortadas en mi escritorio. Veinte fotos recortadas. Veinte poemas recortados.
Y son veinte sobres.
Y son veinte direcciones postales
(el resto las entregué en la mano).
Esto es para vos y para vos y para vos.
Dar.
En cada poema había un poco de ustedes.

jueves, 21 de diciembre de 2006

Guerra de sonidos

Mi situación ya se acerca a la bipolaridad.
Por ahora sigo viviendo en un primer pisito a contrafrente en la calle Tres de Febrero del barrio de Belgrano.
Hace un tiempo vengo pensando en que creo que voy a extrañar algunas cosas de este barrio.
Hasta hoy.
Para que jamás de los jamases extrañe a mis vecinos, estos tipos no tuvieron mejor idea que enredarse en una guerra de sonidos.
GUERRA de sonidos, exactamente.
Ayer por la noche mis vecinos de PB 3 anduvieron revoleando cumbia y más cumbia a los cuatro vientos.
Hasta las cinco de la mañana.
Hoy a las ocho de la mañana, mis vecinos de PB 4 pusieron un disco de marchas militares al grito de: ¡drogadictos, hijos de puta, vayan a vivir a una villa!

Les juro: no sé quien es peor.

Mientras tanto, los silenciosos, estamos escribiendo una nota para presentar urgentemente en el CGP.

jueves, 14 de diciembre de 2006

Docencia

Me da mucha ¿ternura? cuando mis alumnos universitarios, en el medio de un examen preguntan cosas como "¿qué es 'albores'?", o bien, "¿'estrepitoso' es un adjetivo?".
No sé.
A veces mi cerebro los confunde con mis estudiantes de español como lengua extranjera.

jueves, 7 de diciembre de 2006

¿casualidad o causalidad?

Hoy el subte estaba repleto de gente (cuando no). Subí a los apretones, me empujaron, me putearon y luego me sacudieron como en una coctelera.
En Tribunales se despejó un asiento justo delante mío. Pero una voz detrás mío dijo:
-¿No me daría ese asiento, por favor?
Me di vuelta y me topé con un señor anciano que me miraba con ojitos relucientes.
-Es que tengo 84 años -agregó.
Le sonreí.
Es groso ver gente de 84 años en un subte de Buenos Aires. Groso de verdad. Groso onda: este hombre es un valiente.
Se sentó y luego me dijo:
-Soy del año '22".
Pucha, pensé, cuando yo tenga 84 años le diré a un hipotético joven del año 2061: "es que soy del '77". A lo cual el joven me dirá: "¿Cómo que usted es del '77? ¡Si estamos en el '61!". Y yo tendré que explicarle con paciencia: "No, es que soy de 1977".
El hombre de 84 años comenzó a hablar. Supe que había vivido en Santa Fé, en el campo.
-¿Y ahora vive en Buenos Aires?
-Sí, en Olivos.
-Ah, qué hermoso. Mis padres viven en Olivos -le respondí.
-¿En qué calle?
-D.F. Sarmiento.
-Ah, sí. Yo vivo en Chacabuco.
-¿En Chacabuco?
La casa que escrituramos el viernes queda en la calle Chacabuco.
-No me diga, yo me voy a mudar a esa calle.
-¿En serio?
De pronto, como por arte de magia se desocupó el asiento de al lado.
-Venga, siéntese aquí y cuénteme.
Me senté junto a él y en el tramo que duró hasta la estación Juramento descubrimos que viviríamos a una cuadra de distancia. Me contó de su mujer, sus hijos, sus nietos y sus bisnietos. Me indicó las mejores formas de viajar al centro, los rápidos, los horarios y que el barrio era muy tranquilo.
Antes de bajarme me gritó su dirección exacta: ¡Pase a visitarme!
Y agregó que se llamaba Benjamín.

sábado, 2 de diciembre de 2006

Se concretó

¡wow!
¡re wow!
¡guau!
guai
ay...
¿eh?
ah.
aaaaaaaaaaaaaaah.
nah.
seh.
¡síiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!
Oh
Brrr.