¿Duermen tus dioses?, me preguntan en una carta.
No.
No duermen.
En la duermevela encienden los cirios que alumbran el camino de los fueguitos mínimos. Los fueguitos de la madrugada que al mediodía son el fuego necesario que pide tormenta.
No es contradicción, saravá.
Cómo los fueguitos mínimos devienen en llamarada espesa.
¿Cómo es la chispa que enciende el cirio en la madrugada?
No quiero saber.
Mis dioses no duermen.
Yo sí.
martes, 27 de noviembre de 2007
jueves, 22 de noviembre de 2007
Mi nombre está escrito en el aire y en la tierra
Hay días en que el viento es favorable a las ideas y a las proezas. Hay días en los que yo me voy con el viento. El viento me lleva a un orden preciso. Preciso de necesario, no de precisión. Y yo me dejo arrastrar por el viento.
Como la nube de agua que soy.
Pero hay días en los que quiero volver a la tierra.
Enraizarme en la tierra cual animal vegetal.
En esos días florezco.
Como una flor roja.
Como la flor de tierra que soy.
Como la nube de agua que soy.
Pero hay días en los que quiero volver a la tierra.
Enraizarme en la tierra cual animal vegetal.
En esos días florezco.
Como una flor roja.
Como la flor de tierra que soy.
martes, 20 de noviembre de 2007
En la casa de agua siempre habita un animal de fuego
Es mínimo
el brote
verde.
Y es mínimo
lo que hay
que decir.
el brote
verde.
Y es mínimo
lo que hay
que decir.
lunes, 12 de noviembre de 2007
viernes, 2 de noviembre de 2007
Aviva la llama
No se puede escribir con el animal entre los pies. Llevo el animal gateante entre mis rodillas.
¿Cuántas generaciones más domesticaré?
¿Qué me une con mis congéneres?
¿Qué lazos?
¿Por qué la sangre es tan importante?
¿Por qué la sangre, el semen, el flujo, la saliva, todas esas excreciones son tan importantes?
En un barco abandoné mi ave. Era un ave pequeña y risueña. Paladeaba la voz con esquisito pudor. Ni una gota de menos. Lagrimeante y buena moza, redondona y amistosa, mi ave se enternecía de candoroso sudor.
La abandoné.
Abandoné su plumaje rebelde. Su plumaje brillante de ideas tornasoladas.
¿Para qué quiero yo ideas tornasoladas?
¿Para qué quiero yo plumaje brillante?
¿Para qué quiero yo plumaje?
El barco, el carruaje, el recoveco rojo:
subterfugios.
¿Cuántas generaciones más domesticaré?
¿Qué me une con mis congéneres?
¿Qué lazos?
¿Por qué la sangre es tan importante?
¿Por qué la sangre, el semen, el flujo, la saliva, todas esas excreciones son tan importantes?
En un barco abandoné mi ave. Era un ave pequeña y risueña. Paladeaba la voz con esquisito pudor. Ni una gota de menos. Lagrimeante y buena moza, redondona y amistosa, mi ave se enternecía de candoroso sudor.
La abandoné.
Abandoné su plumaje rebelde. Su plumaje brillante de ideas tornasoladas.
¿Para qué quiero yo ideas tornasoladas?
¿Para qué quiero yo plumaje brillante?
¿Para qué quiero yo plumaje?
El barco, el carruaje, el recoveco rojo:
subterfugios.
jueves, 1 de noviembre de 2007
La mujer de las serpientes
Qué absurda la división de bienes. La división de seres. L a división de órganos. Alguien muy maquiavélico ha querido que esto así sea. ¿Cómo es que vine a parar a este mundo? De todos los mundos posibles he imaginado éste. No estaba en mí. Estaba en lo que ustedes vieron de mí. Lo que ustedes querían ver de mí. Este espacio es un fraude. Yo no soy un fraude. Y ahora que las revoluciones no son estallidos ni espasmos de violencia sino una marea lenta que sube, se explaya, va a romper en el punto exacto, donde la flecha es flecha y no arco vacío, donde la ola es bella y no espuma desangrada, ahora que la revolución respira conmigo digo: silence.
Por qué.
La mujer que ven ahí lleva serpientes escondidas en su cabellera castaña.
Yo la peino todos los días y no tengo espejo.
La serpiente muerde mi mano.
Todos los días.
¿Quién se atreve a peinar a una mujer con serpientes en su cabellera castaña?
Nubedeagua se ha roto.
Y esto es recién el comienzo.
Por qué.
La mujer que ven ahí lleva serpientes escondidas en su cabellera castaña.
Yo la peino todos los días y no tengo espejo.
La serpiente muerde mi mano.
Todos los días.
¿Quién se atreve a peinar a una mujer con serpientes en su cabellera castaña?
Nubedeagua se ha roto.
Y esto es recién el comienzo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)