jueves, 27 de junio de 2013

A tiempo

Debí haberte encontrado diez años antes o diez años después...
pero llegaste a tiempo.
Antes, me hubiera gustado conocerte con libertad, sin restricciones,
sin límites ni complejos.
Después, con calma y serenidad,
con paciencia y el tiempo que me permite la experiencia.
Te conocí a tiempo, a tiempo de encontrarte,
para saber que existías, para llenar mis ojos y mi boca de tu sabor.
Para encontrarnos en el mismo tiempo y espacio.
Para disfrutarte y que me disfrutes,
para tocarte y que me toques.
Para que supieras que yo estaba aquí para que me tomaras.
Y que me dejaras tomarte a ti.
No fuiste antes ni después: fuiste a tiempo.
A tiempo para que me enamorara de ti.


Jaimes Sabines

jueves, 20 de junio de 2013

Catzilla

Marilyn: ¿Te das cuenta? ¡Lo tenía ahí! ¡Un zorzal al que le faltaba un ala! ¡Era tan fácil como pescar en un balde!
Otro gato: ¿Y? ¿Qué pasó? ¿Lo agarraste?
Marilyn: ¡Casi!
Otro gato: ¿Cómo casi? O lo agarraste o no lo agarraste.
Marilyn: ¡Lo agarré! Lo tuve en mis zarpas unos segundos apenas.
Otro gato:  ¿Qué? ¿Se te escapó?
Marilyn: Es que hice el pase ese tan lindo con las patas, esa jugadita.
Otro gato: ¡Qué boluda! ¡No se hace la jugadita con una presa tan grande!
Marilyn: Y bueno, pero era pan comido...
Otro gato: Tan pan comido no era....
Marilyn: Es que se metió debajo de un arbusto, lo tenía acorralado, piaba sin parar. El "pío pío" de la muerte.
Otro gato: ¡Ah! Entonces lo agarraste.
Marilyn: ¡No!
Otro gato: ¿No?
Marilyn: ¡NO! Vino mi humana, me agarró y me encerró adentro de la casa.
Otro gato: ¡Me estás jodiendo! Noooooooooo.
Marilyn: Sí, capaz pertenece a Greenpeace o algo, no sé... ¡tengo un odio! ¡Pero un odio!

Un rato más tarde, desayunando...

Hans: Pobre gato, la vida es muy injusta.
Yo: ¿Por?
Hans: Tenía el pájaro ahí, a punto caramelo y le sacamos el gusto.
Yo: ¡Tiene otros gustos! Duerme en una cama, come todos los días comida carísima, le damos queso untable...
Hans: ¡Es verdad! ¿Quién se cree que es? ¿CATZILLA?


miércoles, 19 de junio de 2013

Una función social

Mi papá estuvo enfermo con una de estas gripes que andan pululando. Nada grave: molestias gástricas, dolor de cuerpo, algo de fiebre. Pero ante semejante cuadro, decidió llamar a uno de estos médicos de las obras sociales que van a domicilio. Y entonces sucede lo siguiente: uno de estos médicos va a la casa de mis padres a revisarlo.

Para quien nunca se aventuró en el living de la casa de mis padres les cuento que es un mundo de esculturas, cuadros, mantas, colores, lámparas, artesanías, bibliotecas y música. Todo tiene su lugar adecuado con muy buen gusto, cada obra de arte es una prueba de algún viaje que hicieron y todo tiene su historia, su textura, su leyenda. Hay bibliotecas atiborradas de libros de todo tipo: literatura, historia, filosofía, arte, fotografía. Hay un equipo de música que siempre tiene cds todos desordenados que nunca encajan en sus cajitas correspondientes porque eso es lo que pasa cuando uno escucha música: nunca tiene la biblioteca ni los discos ordenados.

Este médico -que debe visitar muchas casas por día- se sentó en uno de los sillones del living con las manos muy juntas y se quedó observando maravillado el ambiente. Dijo que era la primera casa a la que entraba que en mucho tiempo no veía un plasma encendido en el medio del living.
-Siempre en ese plasma está Tinelli o alguno de estos programas de chimentos. ¿Cómo no enfermarse en esas circunstancias, no?- dijo el médico. -Mi función es también una función social. Yo les digo que apaguen la televisión que los envenena todos los días. ¿Cómo se van a mejorar en esas condiciones?

martes, 18 de junio de 2013

Feliz duplicado!

 Para mi gran e increíblemente geminiana amiga Laura Sol Torrecilla, gracias por tu amistad, tu generosidad, tu honestidad, tu valor para afrontar la vida, tu paciencia a la hora de enseñar tu arte. Me siento muy feliz de haberte conocido. Y algo más: ¡yo sabía que ibas a ser mi amiga el mismo momento en que te vi cuando teníamos catorce años! Así de simple es todo a veces.
Te amo muchísimo, hermanita de la vida. Disfrutá de todo lo que la vida te está regalando. Te lo merecés y MAS. Para vos, ¡¡¡todos estos genios te cantan el feliz cumple!!!






Ya estás en otro terreno

 CAMPBELL: No sabemos qué hacían en las cavernas pero sabemos qué hacen los aborígenes de Australia. Cuando un joven se pone ingobernable, un día vienen los hombres, que van desnudos salvo por unas rayas de plumón blanco de ave que se han pegado al cuerpo usando su propia sangre. Vienen balanceándose al son de rugidos de toro, que son las voces de los espíritus, y estos hombres vienen como espíritus. El joven tratará de refugiarse en su madre y ella simulará protegerlo. Pero los hombres se lo llevan. Una madre ya no le sirve, ¿sabes? No puedes volver a la Madre, ya estás en otro terreno. 
Entonces los muchachos son llevados al territorio sagrado de los hombres y se los hace pasar por una verdadera ordalía: circuncisión, subincisión, beber sangre humana, etc. Así como han bebido leche de la madre cuando niños, ahora beben sangre de hombre. Se están convirtiendo en hombres. Mientras esto tiene lugar, se representan episodios de los grandes mitos. Se los instruye en la mitología de la tribu. Después, al final de todo esto, son devueltos a la aldea, donde ya ha sido elegida la chica con la que han de casarse. El niño vuelve hombre. Ha sido apartado de su infancia y su cuerpo ha sido escarificado (...). Ahora tiene un cuerpo de hombre. Después de semejante espectáculo, no hay posibilidad de que retorne a la infancia.
MOYERS: No se vuelve a la Madre.
CAMPBELL: No, pero en nuestra sociedad no tenemos nada equivalente. Puedes ver hombres de cuarenta y cinco años que siguen tratando de ser obedientes con sus padres. Tienen que ir al psicoanalista, que hace el trabajo por ellos.

Joseph Campbell, El poder del mito, Emecé, Buenos Aires, 1999, pág 129

lunes, 17 de junio de 2013

The sun is up, the sky is blue

A las siete de la mañana la gata se acerca a la almohada. Ronronea. Aún es de noche. La oscuridad la envuelve. Sólo sus ojos son dos faroles verdes.  El sol está del otro lado de la sábana. La gata pide calor. No se lo das. El sueño envuelve la sábana, las patas de la gata y todo es una esponja que absorbe la realidad.
En el naufragio del colchón se huele que el otro ya ha salido de la cama: el trabajo, la presión, el nuevo día: hoy es lunes. Y la gata es un motorcito de amor y pelos. Calor.
Amor y pelos. Calorcito de hornalla. Lunes. Nueve de la mañana. Un mate y la página del diario sensacionalista que te dice que aún no saben quién mató a Ángeles Rawson.
El pantallazo de las redes sociales, los mails, el saludo de él que ya llegó a su trabajo y te saluda desde la pantallita del gtalk. Nos decimos algunas palabras que nos hacen reir. Reímos y las pantallas se abrillantan un poco. Tal vez.
Aunque quizás sea la gata que ilumina la pieza con sus faroles verdes. Te relojea de cerca. Pero no muy cerca. Y el mate sigue caliente y está rico porque le pusiste un poquito de marcela que es una planta que te encanta.
Y el cielo está tan azul que se te viene a la mente esa canción de The Beatles que escucharon juntos en el fin de semana y que vos dijiste, sí, tal cual.

The sun is up
the sky is blue
it's beautiful
and so are you.
Dear Prudence
won't you come out to play?

viernes, 14 de junio de 2013

Yo amo a Joseph Campbell

MOYERS: ¿En qué se diferencia un mito de un sueño?
CAMPBELL: Un sueño es una experiencia personal de ese terreno profundo y oscuro que constituye el soporte de nuestras vidas conscientes, mientras que un mito es el sueño de una sociedad. El mito es el sueño público y el sueño es el mito privado. Si sucede que tu mito privado, tu sueño, coincide con el de la sociedad, habrás logrado un buen acuerdo con tu grupo. Si no, te aguarda una aventura en la selva oscura.
MOYERS: De modo que si mis sueños privados están de acuerdo con la mitología pública, tengo más posibilidades de llevar una vida feliz en esa sociedad. Pero si mis sueños privados están en desacuerdo con los públicos...
CAMPBELL: ...tendrás problemas. Si te ves obligado a vivir en ese sistema, serás un neurótico.
MOYERS: Pero ¿no hay muchos visionarios, e incluso hombres públicos y hérores, cercanos a la neurosis?
CAMPBELL: Son personas que han abandonado la sociedad que los habría protegido y se han internado en la selva oscura, en el mundo del fuego, de la experiencia original. La experiencia original no ha sido previamente interpretada, por lo que tendrás que arreglártelas solo. O puedes o no puedes. No tienes que salir muy lejos del sendero ya interpretado para encontrarte en situaciones muy difíciles. El coraje para enfrentarse con las pruebas y dar luz a un cuerpo nuevo de posibilidades en el campo de la experiencia interpretada para que la experimenten otros... eso es lo que hace el héroe.
MOYERS: Dices que los sueños nacen de la psique.
CAMPBELL: No sé de qué otro lugar podrían venir. Vienen de la imaginación, ¿no? La imaginación tiene sus bases en la energía de los órganos del cuerpo, y éstos son los mismos en todos los seres humanos. Al provenir la imaginación de una base biológica, lo más probable es que produzca determinados temas. Los sueños son sueños. Hay ciertas características de los sueños que pueden ser enumeradas, no importa quién las esté soñando.
MOYERS: Pienso en el sueño como en algo muy privado, mientras que un mito es algo muy público.
CAMPBELL: En ciertos estadios un sueño privado trabaja sobre temas verdaderamente míticos, y no puede interpretarse sino mediante una analogía con un mito. Jung habla de dos órdenes del sueño, el personal y el arquetípico o de dimensión mítica. Un sueño personal puedes interpretarlo por asociación, viendo de qué asuntos de tu propia vida habla, o en relación a tus problemas personales. Pero de vez en cuando se produce un sueño que es puro mito, que transporta un tema mítico, o del que se dice, por ejemplo, que viene del Cristo interior.  

martes, 11 de junio de 2013

De héroes y heroínas

"La aventura usual del héroe empieza con alguien a quien le han quitado algo, o que siente que falta algo a la experiencia normal disponible y permitida a los miembros de su sociedad. Esta persona entonces emprende una serie de aventuras más allá de lo ordinario, ya sea para recuperar algo de lo perdido o para descubrir algún elixir que da vida. Usualmente es un ciclo, una ida y una vuelta. (...) Evolucionar de esta posición de inmadurez psicológica hasta el valor de la responsabilidad y la seguridad en sí mismo exige una muerte y una resurrección. Es el tema básico y universal del periplo del héroe: salir de una condición y encontrar la fuente de la vida para regresar maduro y enriquecido."

Joseph Campbell, El poder del mito, Emecé, Buenos Aires, pág 180.

A todos mis amigos, amores, parientes, colegas: todos aquellos que están en la búsqueda de aquello que "falta".
La mejor de las suertes.
El mejor de los viajes.
La mejor de las idas.
La mejor de las vueltas.

domingo, 9 de junio de 2013

I will

Ayer, volviendo por la Richieri, luego de un cumpleaños de un amigo que cumplía cuarenta, rumbo a casa, Nico pone el álbum blanco de The Beatles. Cuando llega el turno de "I will", me mira y me dice, "Cariño: esta es nuestra canción, ¿no?"
Y yo me morí de amor, como siempre.

martes, 4 de junio de 2013

Habemus living

Hubo cumple de amiga que tiene casita pequeña. Ofrecemos la nuestra. Últimamente hay muchas fiestas, reuniones, festejos en casa. Nos pone contentos poder compartir los metros cuadrados cubiertos con gente que amamos. Los amigos llegan, se acomodan, traen bebidas, comida. Nosotros ponemos la luz, la vajilla (defectuosa pero nadie se queja), los cuadros, el ambiente, la gata (si quiere) y la música.

(Acá iría insertada una foto pero Hans se niega a aparecer en Internet)