22/2/07

El dios de las pequeñas cosas

Altamente recomendable: The God of small things de Arundhati Roy (existe traducción en las librerías de Buenos Aires).

5 comentarios:

barluz dijo...

Uy que loco Flor, a mi me paso lo mismo! Antes AMABA leer, porque si, era un placer total sentarme en un sillon a leer horas y horas. Y despues no se que paso, pero perdi totalmente ese placer, intentaba pero no me podia concentrar, y me sentia re mal por eso.

El otro dia una alumnita de espanol me presto su libro preferido, lo empece a leer y me re enganche, ojala que sea el principio del reencuentro con mis ganas de leer.

SP dijo...

Parece ser un mal muy común no? Quizás no es específicamente con la lectura, sino con las cosas gratuitas y bellas que adoramos y en algún momento, perdemos de vista.

Ayer, buscando un cd virgen, encontré un cd grabado con canciones viejas, y me puse a escucharlo... ¡hacía tanto tiempo que no escuchaba música porque sí! ¡Y canté un rato!

Y es verdad que no es lo mismo leer de pasadita en el colectivo que "sentarse a leer". Pero como que uno a veces empieza a "vivir de pasadita", ¿no?

piscica dijo...

Qué loco, me pasa al revés: a mí me cuesta leer un libro por obligación. Yo siempre quiero leer los libros porque sí, porque quiero, porque se me antoja ¿será por eso que leo más bien poco? ¿será por eso que curso a la velocidad de una oruga?
who knows...

Flor dijo...

barluz: ¿cuál es el libro preferido de tu alumnita de español? Casualmente este libro que estoy leyendo me regaló una alumna de español que se volvía a Canadá.

princesa: ¡sabias palabras, conejo! No está bueno vivir de pasadita.

querido pez: en otras palabras creo que dijiste lo mismo que yo en el post. Pero tu idioma agua siempre trastoca todo... :)

lou dijo...

viste qué lindo libro?
y coincido con algún otro de tus gustos, porque el CD de la banda de sonido de Hable con ella (que aparece en otro post) es lo más.
Bueno, esa película es lo más.
Bueno, Pedro lo es.

Un beso