martes, 6 de abril de 2010

The lion and the lamb

If the weak and the strong are
the lion and the lamb
and the dark are the curses of ham
could a word from above favor
hatred over love
oh i just can't understand.

Laura Love, Octoroon

Hace días que le debo al hombre de la garita. No me gusta pagarle, está en contra de todo lo que pienso pero es un hábito que comenzó mi ex (cuando vivía acá) y el hombre de la garita sabe de todos mis movimientos. Cada vez proliferan más los hombres de las garitas. Es nefasto. Nadie sabe muy bien de dónde salen, quiénes son, quiénes los ponen ahí. Pero tampoco nadie cuestiona nada. Es un hábito de esta cuadra pagarle al hombre de la garita. Y yo, que detesto este hábito y lo considero inútil, siento que no puedo salirme de este círculo. Como hace días que lo vengo pateando viene y me toca el timbre. Lo atiendo en joggins y descalza.

-Ah, veo que vos sos como yo. ¡Te gusta andar descalza!
-Eeeh, sí, tomá, era esto, ¿no?
-Si, ¡es buenísimo andar descalzo! Los médicos dicen que hay que andar descalzos una hora por día.
-Ajá...
-Porque somos como un placa receptora de energía, ¿viste? Así que hay que andar descalzo en el pasto para descargar.
-...

Cuando cierro la puerta de casa me agarro la cabeza. ¡Dios mío! El hombre de la garita y yo tenemos algo en común.

3 comentarios:

El Griego dijo...

Vos sabes, estuve de viaje en moto en mis vacaciones. Un amigo me encargó que le comprara algunas cosas para su lancha en una casa de náutica por Olivos. Después de eso, recorrí un poco la zona norte. Hace un decenio Bar Isidro era uno de los lugares preferidos para los sábados con algunos amigos. Me soprendió la cantidad de garitas que vos mencionás. Aquí no existen, o al menos no las he visto. Provocan una sensación rara, como "orwelliana" si cabe... Sobre los "algo en común"... No se si es para preocuparse. Conozco a alguien que es racista confeso, xenofobo, y es admirable lo que conoce de libros. Y la verdad, no siento ni remotamente algun tipo de cercanía...

mato dijo...

jajaja!
acá tenemos garita, pero el hombre de la garita se fue. quedó la garita abandonada. supongo que nadie le pagaba. yo nunca le pagué, al menos, a pesar de las varias cartas de la nefasta asociación de vecinos pidiendo que ayudemos al hombre de la garita. a la larga, supongo que la garita misma, puesta ahí, funciona para que parezca un barrio seguro y los vecinos –nefastos o no– anden tranquilos.

Flor dijo...

Griego: sabés que la frase de Hans al respecto fue: "¡Florencia tenés más de una cosa en común con el hombre de la garita: ambos son humanos!". Así que ya no me preocupa más.

mato: Sé de lo que hablás, en la cuadra de mis padres, para que te des una idea...al tipo de la garita ¡¡le robaron la garita!! Así que es medio cualquiera. Tengo un par de episodios medio truculentos con esta gente, igual. No sé cómo se sale del círculo.