¿A vos no te pasa que entrás a una librería y hay libros que te llaman? Ayer, un coro de voces. Y encima tan distintos. Tuve que contenerme. Uno para regalar. Tres para mí. Hay libros maravillosos allá afuera. Y hay uno pugnando por salir. Lo tengo clavado en el esternón.
Dios.
Y esta vorágine de que me haya puesto a escribir otra vez es culpa de esta bella persona.
2 comentarios:
ME PASA SIEMPRE!!Tengo una pila de libros que voy acumulando al lado de mi cama durante los meses intensivos de laburo, y que luego los termino devorando en el poco de tiempo de vacaciones.Creo que no me alcanza la vida para leer todo lo que quisiera...!
Saludos!!
¿Culpa mía? Esa semillita siempre está en vos. Y también está en mí. Lo que pasa es que, a veces, en vez de regarnos a nosotras mismas, nos regamos una a la otra.
Me tenés que contar cuáles son esos libros, che! Me acordé que te tenía que pasar un par de poemas, ahí los busco y te los paso por mail. Abrazo enorme, ídola.
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