Clase de yoga. Estoy hecha un bollito en la posición del niño. Acabo de estar algunos minutos en shirsasana, el equilibrio sobre la cabeza.
-Muy bien tu paro de cabeza, Flo - me dice la profesora mientras me da una suave palmada en la espalda. -Espero que muy pronto lo puedas hacer sin la pared.
Todavía no puedo subirme al paro de cabeza sin la pared. La necesito. Luego del primer envión, una vez que estoy arriba, no tengo problemas para lograr el equilibrio. Pero en el momento de subirme al asana me da terror caerme para atrás.
-Todo llega a su debido tiempo- me dice la profesora- pero va a llegar un momento en que no vas a necesitar la pared. Mientras sientas que sí, usala. Todos al principio necesitamos de un sostén cuando nos paramos por primera vez.
-Es que me da miedo irme para atrás.
-Es lógico, estás aprendiendo a pararte sobre la cabeza. Pero pensá que es es lo mismo que cuando te paraste sobre los pies. Sólo que ahora es a la inversa. Tenés que aprender a pararte al revés.
Y se va a corregir a otro alumno.
Y me deja boquiabierta. Como un bebé que recién dio sus primeros pasos agarrado de algo que lo sostiene.
2 comentarios:
Nunca pude pararme de cabeza, es mas, hace 6 meses deje ashtanga yoga, por las vacaciones y despues nunca retome...
Leer tus posts me renuevan las ganas de sentirme asi.
Felicitaciones, alegra el dia leer lo que escribis
Gracias! Nunca es tarde para empezar pero siempre con alguien que te guíe bien. A mí me gusta mucho el método Iyengar. Nunca probé ashtanga yoga pero empiezo el martes que viene. Luego te cuento!
Saludos!
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